Categoría: personajes

  • Freud y la «menopausia» de la suegra de Isabel II

    Freud y la «menopausia» de la suegra de Isabel II

    Alicia de Battenberg (1885-1969). Princesa consorte de Dinamarca y Grecia. Biznieta de la legendaria reina Victoria de Inglaterra. Exiliada y nómada, entregada a labores humanitarias. Madre de Felipe de Edinburgo y de varias hijas casadas con altos cargos nazis. Sorda de nacimiento, internada en sanatorios diagnosticada como esquizofrénica. Fundadora de una orden religiosa y colaboradora de la Cruz Roja. Decía tener poderes curativos y contactos con el más allá. Etcétera: la Europa del siglo XX apretada en un personaje zarandeado por las locuras de la época.
    El personaje aparece en la tercera temporada de The Crown.

    Los directores de los dos sanatorios donde fue sucesivamente internada en 1930-31 (Tegel, en Berlín; Kreuzlingen, en Suiza) eran admiradores de Freud: el psicólogo Ernst Simmel y el doctor Ludwig Binswanger.
    Y le trasladaron la consulta: cómo tratar a tan distinguida paciente. Por cierto, no era la única celebridad que alojaban: el gran Nijinsky era otro de sus clientes.

    La recomendación de Freud: rayos X para acelerar la menopausia.
    Freud creía que sus visiones religiosas eran el producto de la represión sexual, y recomendó rayos X sobre sus ovarios para eliminar su deseo sexual, lo que provocó a la princesa Alicia una menopausia precoz. ¿Encarnizamiento terapéutico?
    Parece que el tratamiento le dejó secuelas de por vida aunque su determinación y fuerte personalidad la mantuvieron firme. Al cabo de poco, dejó el sanatorio suizo de Kreuzlingen y fue trasladada a Meran, un pueblo del norte de Italia.

    Pura supervivencia. Tras la radiación y los internamientos, vivió fiel a su estilo casi cuarenta años más.


    WEBGRAFÍA
    . Sorda, monja y víctima de Freud: la fascinante historia real de la madre del Duque de Edimburgo
    . The Crown Hints that Princess Alice Was Treated By Sigmund Freud. The Full Story is Incredible

  • «el idiota de Freud», exclamó Alma Mahler

    «el idiota de Freud», exclamó Alma Mahler

    Dicen que Lacan era tacaño. Y basta ver la casa de Freud donde se instaló en Londres para intuir que también se hizo rico. Digo también porque parece que ambos compartían sendos rasgos. Cobraban mucho y administraban el negocio.
    A Freud no le gustaba la música (allá queda el piano al que tuvo que renunciar la hermana para que él pudiese estudiar sin distraccions) y a Lacan tampoco le interesó.
    Un lastre histórico para las pretensiones del psicoanálisis, que ignora el lenguaje más importante después del verbal y el matemático

    Freud y Mahler eran judíos y vieneses famosos. Paradoja: jamás se encontraron. Excepto en una ocasión, a iniciativa del compositor tras dos tentativas fallidas, en Leiden (Holanda) en 1910.
    Se entrevistaron solo durante unas horas, que han pasado a la mitología de la historia de la cultura en forma de acontecimiento. El encuentro mítico ha inspirado, por ejemplo, el documental fancés La Cinquième Symphonie de Mahler, d’un pas mesuré (2009), la película alemana Mahler auf der Couch (2010)


    DOCUMENTAL
    La Cinquième Symphonie de Mahler, d’un pas mesuré. Pierre-Henry Salfati (Francia, 2009)

    FICHA:
    https://www.film-documentaire.fr/4DACTION/w_fiche_film/23948_0

    «D’un pas mesuré», telle est l’indication que donne Mahler au début du premier mouvement de sa cinquième symphonie qui s’ouvre par une marche funèbre monumentale. Cette composition évoque un lourd traumatisme d’enfance que Mahler confie à Freud. Au cours d’une unique rencontre, les deux hommes se sont promenés un jour d’août 1910. Une longue ballade… D’un pas mesuré. Promenade psychanalytique de quatre heures qui bouleversera sa vie d’homme et de compositeur.

    CÓMO VER:
    ARTE Boutique (alquilar o comprar)
    MUBI (en este momento, no disponible)

    FRAGMENTO:
    https://vimeo.com/93620492


    Mahler auf der Couch. Felix O. Adlon, Percy Adlon, 2010


    Mahler murió al año siguiente de la entrevista con Freud. Por lo visto, el músico no había pagado la sesión. Por prisas, despiste o la típica falsa indiferencia hacia el dinero de los artistas.
    ¿Y qué hizo Freud? No lo olvidó y escribió a la viuda reclamando el pago de la minuta.
    Se entiende que la sofisticada Alma, que siempre se relacionó con la aristocracia cultural de su época, se refiriese al psicoanalista como «el idiota de Freud».

  • más Sócrates, menos Descartes

    más Sócrates, menos Descartes

    Con Sócrates empieza la filosofía (por eso los filósofos anteriores se llaman presocráticos: un antes y un después) pero con Descartes empieza la era de la razón y por tanto de la ciencia.
    ¿La filosofía por un lado, la ciencia por otro?

    El psicoanálisis ama a Sócrates. ¿No se dedica a preguntar y callar el/la psicoanalista? ¿No se dedica a recortar significantes para cuestionar los significados adheridos?: «¿Qué quería usted decir con…?», «¿A qué se refiere cuando dice que…?», «¿Qué es para usted…?» Cuestionar el enunciado para escuchar la enunciación. Tirar el hilo para llegar a desde dónde se habla, por boca de quién habla.

    El psicoanálisis son preguntas. El analista pregunta al analizante para que este se pregunte.
    La ciencia con certezas. Provisionales, mientras se contrasta y comprueba y hasta que no aparece una nueva hipótesis que genera nuevos axiomas o viceversa. Pero certezas.

    Descartes proporcionó a la cultura la primera certeza. No puedo confiar de mis percepciones, de mis sentidos. Pero tengo la certeza de que pienso. La certeza del pensamiento. De la razón. De la ciencia que arrancó a partir de aquí.

  • La Salpêtrière, de Charcot a Chaplin

    La Salpêtrière, de Charcot a Chaplin

    Siglo XVII, Luis XIV construye el palacio de Versalles y la Salpêtriere, los dos extremos. Del lujo exhibido a la miseria ocultada.

    Hospital, reformatorio, cárcel. Depósito de enfermas, pobres, delincuentes. De mujeres: bastaba que el padre o el marido firmase la autorización para desprenderse de una mujer que les resultase molesta. Histéricas, epilépticas, dementes, brujas, prostitutas, espiritistas, idiotas, lesbianas, judías… En realidad, mujeres maltratadas, castigadas a vivir encerradas y encadenadas hasta el s.XIX en que Philippe Pinel les quitó los grilletes.


    Después, el mítico Charcot convirtió el Hospital en un centro de peregrinación científico, el joven Freud entre muchos otros. Charcot desplegó un monumental trabajo de investigación neurológica. Carismático, invirtió su talento artístico (aficionado a la pintura y la fotografía) en poner de moda la Salpêtrière. Sus enfermas pasaron a ser reclamo de performances, mostradas como espectáculo. ¿No han sido los circos muestrarios aplaudidos de personas deformes? Artistas, burgueses, espectadores curiosos. La mujer rebelde, domesticada como los animales salvajes en los zoos.

    De este híbrido perverso de enfermedad y espectáculo surgieron estrellas como Augustine o Jane Avril, la musa de Toulouse-Lautrec.
    Y toda una estética. La estética convulsiva, evidente en la gestualidad de Chaplin e incluso rastreable en la obra literaria de Samuel Becket, aficionado al cine y al music hall:

    “El cabaret parisino y el café-concert entre 1865 y 1907 se caracterizaban por mostrar un lenguaje corporal convulsivo hecho de movimientos frenéticos, angulares y ‘mecánicos’ acompañados por tics y muecas. En las postrimerías del siglo XIX las performances de cabaret en París estaban muy influenciadas por el discurso médico sobre la histeria y la epilepsia y por las descripciones populares de los desórdenes nerviosos que aparecían en diarios y revistas”

    Un sarcasmo: el Hospital celebraba un baile anual donde las familias de bien podían congeniar los las locas seleccionadas. El baile de las locas:
    El baile de las locas, una novela de Victoria Mas (2021), llevada al cine por (Mélanie Laurent, 2021)

    Y otro sarcasmo: Lady Di murió en el hospital de la Salpêtrière. Paparazzi. Todos los focos del mundo. La última pirueta.


    REFERENCIAS:
    · El teatro de las locas: el oscuro experimento de los inicios de la psiquiatría en el hospital más grande de París
    · Rae Beth Gordon: De Charcot à Charlot: Mises en scène du corps pathologique. Presses Universitaires de Rennes, 2020 (Amazon)

  • Saussure Jr., psicoanalista

    Saussure Jr., psicoanalista

    ¿Qué les pasa a estos edipos que se llevan mal con su padre?
    Freud, adorado por su madre, le reclamaba a don Jakob que no tuviese una personalidad fuerte, que no fuese valiente a la hora de enfrentarse al mundo. Como comerciante, como judío. Y Lacan achacaba a su padre ser un calzonazos.
    Turno del hijo de Ferdinand de Saussure: le reclamaba ser mujeriego y alcohólico. O sea, un disoluto de vida nada ejemplar, más teniendo en cuenta que pertenecían a una de las familias más ricas y tradicionales de Ginebra, cuando Suiza ya era un oasis elitista. Chaplin escogió este paraíso para vivir durante décadas, lejos de la justicia norteamericana. Por cierto, Jung era suizo.

    Raymond de Saussure (1894-1971), psicoanalista y psiquiatra, primer presidente de la Federación Psicoanalítica Europea, miembro activo de la IPA, de la SSP y de la SPP, fundador de la Federación Europea de Psicoanálisis y promotor de la buena nueva en todo el mundo.
    Se analizó con Freud, de quien reconoció su talento o perspicacia pero no tanto sus dotes como analista: hablaba demasiado en las sesiones. Justo lo contrario que Lacan.
    Se analizó más tarde con Rudolph Lowenstein, con quien también se analizó Lacan. Episodio polémico este, por cuanto se han filtrado versiones que forman parte del inevitable gossip que acompaña a los famosos y las familias.

    Raymond de Saussure, erudito y sensible como el padre que le molestaba, estudió la civilización griega desde un punto de vista psicoanalítico (Le miracle grec; étude psychanalytique sur la civilisation hellénique), historió el movimiento psicoanalítico y sobre todo escribió La Méthode Psychanalytique, una magnífica introducción, con prólogo de Freud, al método psicoanalítico.
    Puede leerse (y descargarse en distintos formatos) en Internet Archive

    Enlaces:
    En Histoire de la Folie pueden leerse en línea cuatro artículos de Raymond de Saussure
    En Granger hay una foto de una reunión en 1929 de psicoanalistas (Rene Laforgue, Raymond de Saussure, Sophie aMorgenstern, Yvonne Allendy (?), Rene Allendy)

    Apenas hay imágenes de Raymond de Saussure. La que encabeza el post es una captura de un vídeo colgado en YouTube, que recoge momentos del XI Congreso de la IPA en 1929.

  • Freud según Betty Friedan

    Freud según Betty Friedan

    Betty Friedan (1921-2006) dedica todo el capítulo 5 de su libro La mística de la feminidad (1963) al psicoanálisis de Sigmund Freud para denunciar y rebatir las teorías sobre la mujer y la sexualidad que Freud había instituido y que los psicoanalistas norteamericanos de los años 60 todavía continuaban aplicando como dogma de fe.
    El título del capítulo resume bien su contenido: El solipsismo sexual de Freud

    Destaco algunas citas literales:

    Es preciso saber lo que Freud estaba describiendo en aquellas mujeres victorianas para comprender la falacia que supone aplicar literalmente su teoría de la feminidad a las mujeres de hoy en día […] Gran parte de ello se ha quedado obsoleto y ha sido contradicho por el conocimiento que forma parte del pensamiento de cualquier científico social hoy en día, pero que no se conocía en tiempos de Freud.

    Pero a la hora de describir e interpretar dichos problemas, fue prisionero de su propia cultura. La investigación moderna ha puesto de manifiesto que mucho de lo que Freud creía ser biológico, instintivo e inmutable es en realidad consecuencia de unas causas culturales específicas. Mucho de lo que Freud describía como característico de la naturaleza humana universal era sólo característico de determinados hombres y mujeres de la clase media europea a finales del siglo XIX.

    Ernest Jones, su biógrafo, dijo que «Freud hizo un intento desesperado por aferrarse a la seguridad de la anatomía cerebral». De hecho, tuvo la capacidad de ver y de describir los fenómenos psicológicos de una forma tan vívida que, aunque sus conceptos recibieron nombres que tomó prestados de la fisiología, la filosofía o la literatura —envidia del pene, ego, complejo de Edipo— daban la sensación de tener una realidad física concreta.

    Toda la superestructura de la teoría freudiana se basa en el estricto determinismo que caracterizó el pensamiento científico de la era victoriana. […] no sólo la cultura de la Europa victoriana, sino la cultura judía en la que los hombres repiten diariamente la plegaria: «Te doy las gracias, Señor, por no haberme hecho mujer», y las mujeres rezan sumisas: «Te doy las gracias, Señor, por haberme creado según tu voluntad.»

    El complejo de castración y la envidia del pene, dos de las ideas más elementales de todo su pensamiento, son conceptos postulados partiendo del supuesto de que las mujeres son biológicamente inferiores a los varones.

    Todas aquellas mujeres en las que advirtió problemas sexuales sin duda debían de tener graves problemas de bloqueo del crecimiento, un crecimiento carente de una identidad humana plena.

    Freud fue interpretado para las mujeres estadounidenses en unos términos curiosamente tan literales que el concepto de envidia del pene adquirió una vida mística propia, como si existiera independientemente de las mujeres en las que se había observado.

    Etcétera. Contundente y clara como suelen ser los/las ensayistas norteamericanos/as.
    Freud elevó a categoría psicológica universal lo que eran condiciones de vida de la mujer burguesa en la era victoriana. Y lo hizo a partir de prejuicios machistas de la época, que Friedan ejemplifica con abundantes textos del propio Freud en los que reivindica los tópicos de la mujer sumisa y dulce, buena esposa y mejor madre, que definieron su conducta personal durante su vida.

  • Arthur Schnitzler (1862 – 1931)

    Arthur Schnitzler (1862 – 1931)

    Médico, como su abuelo, su padre y su hermano, famoso por su obra literaria y la admiración que le profesaba Freud, coetáneo suyo y con el que compartió la Viena de entresiglos.

    Su extensa obra (unas 50 obras teatrales y casi 60 relatos además de guiones cinematográficos) explora la moral burguesa de su época a través de argumentos en los que la sexualidad es protagonista.

  • Egon Schiele (1890 – 1918)

    Egon Schiele (1890 – 1918)

    Pintor prolífico, precoz (murió a los 28 años) y genial. Discípulo de Klimt y máximo representante del expresionismo junto a Kokoschka. Moderno y vanguardista en su obra y en su vida, escandalizaba a la sociedad vienesa de su tiempo mientras era admirado por la élite cultural. Su perfil de artista maldito (fue encarcelado y acusado en ocasiones de corrupción de menores por sus desnudos) contrasta con la aceptación en el circuito comercial.
    Es conocido sobre todo por sus retratos ( incluidos casi 100 autorretratos) aunque también pintó paisajes que han sido comparados con Van Gogh.

    Schiele formó parte de una intelectualidad (ciencia, arte, pensamiento) innovadora y exitosa, de la que sin embargo Sigmund Freud no se sintió atraído ni apenas interesado a pesar de compartir época y ciudad.

    Su expresión me recuerda a Wittgenstein, otro ilustre vienés de la época. Y su estilo y temática me recuerdan a Lucien Freud, ¿casualmente? nieto del psicoanalista.

  • Jean-Claude Milner (1941 – )

    Jean-Claude Milner (1941 – )

    Bio

    Lingüista, filósofo y ensayista, alumno y amigo de Lacan.
    Formado en la École Normale Supérieure de Paris y en el MIT de Massachusetts.
    Estudió con Althusser y Roland Barthes.
    Coincidió con Jacques-Alain Miller y ambos participaron en los Cahiers pour l’Analyse.
    Traductor al francés de Aspectos de la teoría de la sintaxis de Chomsky.

    Principales obras

    • Introducción a una ciencia del lenguaje
    • El amor por la lengua. Sobre el deseo del lingüista y sobre lalengua. Discute las ideas de Saussure y Chomsky pero sobre todo despliega una apasionada reflexión sobre lalengua.